El Ministerio de Salud Pública ha iniciado gestiones para trabajar en forma conjunta con el Colegio de Médicos Veterinarios de Salta en el abordaje de la leishmaniasis visceral, ya que esta es una zoonosis que se transmite de los perros a los humanos.

Con ese fin, hubo una reunión entre miembros del equipo de la Dirección General de Coordinación Epidemiológica, autoridades del Colegio de Médicos Veterinarios y profesionales del Instituto de Patología Experimental dependiente del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas - Universidad Nacional de Salta).

Sobre la temática, el director general de Coordinación Epidemiológica, Francisco García Campos, explicó que la leishmaniasis visceral es un problema emergente en la provincia de Salta. “Los primeros casos aparecieron en el año 2018 y a la fecha hay acumulados 47, principalmente en niños comprendidos entre los dos y los cuatro años”, dijo.

El profesional amplió diciendo que se trata de una enfermedad que afecta mayormente a la población infantil y con problemas nutricionales. “La leishmaniasis visceral produce anemia, requiere internación y puede haber casos fatales”, comentó García Campos, agregando que “el perro es el principal reservorio de la enfermedad y en los últimos tiempos se observa un aumento en el número de casos de leishmaniasis visceral canina en el norte de la provincia”.

El departamento San Martín es el más afectado con la enfermedad, tanto en animales como en humanos y últimamente han aparecido algunos casos en el departamento Rivadavia, dijo García Campos.

Por ello, desde el Ministerio de Salud Pública se ha tomado la decisión de trabajar junto a los profesionales veterinarios privados para controlar la enfermedad, desarrollando una estrategia de identificación de canes enfermos y control de la población canina mediante castración para disminuir la cantidad de reservorios, explicó Nicolás Ruiz de Huidobro, jefe del programa de Zoonosis.

El presidente del Colegio de Médicos Veterinarios, José Rolando Blanco, destacó la importancia del trabajo conjunto y coordinado para mitigar la enfermedad. La presencia de profesionales del Instituto de Patología Experimental obedece a que este organismo cuenta con el laboratorio en el que se diagnostica la leishmaniasis visceral canina y humana.