En el marco de los 40 años de democracia en las redes se viralizó un video del año pasado dónde Victoria Villarruel, actual candidata a vicepresidenta de La Libertad Avanza (LLA), hablaba en contra de la justicia de reparación histórica y las políticas de derechos humanos, y acusaba a Raúl Alfonsín de ser abogado de terroristas.

Más allá de sus intentos por despegarse de su pasado y decir que sus visitas a asesinos de lesa humanidad formaban parte de una investigación para un libro, las caretas de la abogada apologista se cayeron. En las imágenes pertenecientes a su intervención en la Cumbre de la Iberosfera, que compartió junto a dirigentes de ultraderecha de Vox el año pasado, la compañera de fórmula de Javier Milei expresa: “Todo lo que han escuchado en los últimos 40 años de la República Argentina referido a su pasado es falso. Todo lo que han escuchado de la Argentina ha sido construido por la izquierda, por las Madres de Plaza de Mayo, por las Abuelas y por todos aquellos que integraron Montoneros y el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP)”.

“Ni Argentina está en la vanguardia de los derechos humanos ni las Madres ni las Abuelas son blancas palomas”, agrega en su violenta alocución.

En este contexto, Victoria Villarruel arremetió contra Raúl Alfonsín: “A partir del advenimiento de la democracia quien asume, que era el presidente Alfonsín, era un abogado de organizaciones terroristas, tenía un compromiso con esta gente ideológico. Entonces, cuando se investigan los crímenes cometidos durante la década del ‘70 se eligió hacerlo solamente a partir del gobierno de facto. Nunca se quiso investigar qué crímenes habían cometido Montoneros, el ERP, las Fuerzas Armadas Peronistas, las Fuerzas Armadas Revolucionarias. Nunca estuvo la intención de investigar esos crímenes y de escuchar a sus víctimas”.

Vale aclarar que el expresidente radical ordenó enjuiciar a las cúpulas de las organizaciones guerrilleras y al juzgamiento ante el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de los integrantes de las tres primeras Juntas Militares. Tanto, los miembros de organizaciones armadas como los militares acusados de delitos de lesa humanidad fueron indultados durante el gobierno de Carlos Menem.

Además, Villarruel señalaba: “¿Hubo abusos por parte del Estado? Sí, pero también hubo terribles violaciones a los derechos humanos cometidas por las organizaciones armadas. Los terroristas, a partir del año ‘83, ocuparon el lugar de sus propias víctimas y se apropiaron de sus derechos humanos”.

“Esta matriz del mal es que la está actualmente ocupando cargos públicos, indemnizándose a sí mismos, enriqueciéndose. Están detrás de la causa indigenista, del feminismo verde, de la causa ambientalista y de toda manifestación cultural gramsciana”, afirmaba en su ensalada de odio.

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